Una oportuna visita con Paula a la galería de arte Ysabel Pinyol me permitió descubrir la sorprendente exposición Tian'anmen de artistas chinos pero también descubrí la sorprendente galerista Ysabel Pinyol, una joven arquitecta emprendedora que vive con una pasión fascinante el despegue de su innovadora galería.
Y una sorprendente casualidad nos ha llevado a los tres a visitar al escultor Enric Pladevall en su alucinante finca L'Olivar. Enric nos ha recibido con un trato exquisito y nos ha acompañado por toda la finca mostrándonos las monumentales piezas que forman todas juntas y junto al propio entorno natural un proyecto único que será un legado extraordinario para su fundación privada.
Un momento muy emotivo ha sido cuando Enric me ha mostrado las infografías de los "virtual Projects" que le hice 9 años atrás y que estuvieron colgadas en aquella entrañable exposición en la Sala Maeght. Recuerdo con mucha nostalgia el trabajo junto a Enric en los "virtual projects" pero lo más emocionante es ver que algunos de los proyectos "imposibles" que modelé por ordenador en paisajes ficticios se han llevado a cabo en el mundo real.
Me siento feliz de ver a Enric feliz en L'Olivar y de verlo trabajar tan ilusionado en nuevos proyectos internacionales que le permitirán continuar dejando su mágica huella en los emplazamientos más afortunados de este mundo. Gracias Enric por tu amabilidad y gracias por la preciosa pintura que me has regalado y que ya es la pieza número 7 de mi particular colección de tu obra, quizá este número mágico producirá algún momento mágico como el que ocurrió con el fus xv.
