Fue divertido participar ayer en el debate del DV de TV3 sobre Halloween vs Castanyada. Y dicho sea de paso, es muy significativo que las televisiones empiecen a utilizar Skype para las conexiones en directo con cualquier parte del mundo. Tal y como dije en la tele, la preparación del Halloween en California estaba siendo una locura, pero hoy puedo afirmar que la fiesta ha sido un auténtico desfase. Ver para creer...
Creo que esta fiesta responde mucho a la manera que tienen los americanos de hacer algunas cosas: Halloween es una fiesta desproporcionada y muy enfocada al consumismo. Fuentes oficiales dicen que este año cada americano se ha gastado una media de 56 dólares en la preparación de Halloween y que la fiesta ha generado 4,7 billones de dólares en cifras de negocio. Es realmente sorprendente ver lo que se gasta la gente decorando sus casas con elementos de terror o comprando los disfraces más macabras. Hombre, mirándolo desde esta parte tétrica, Halloween sigue siendo una fiesta de culto a los muertos, pero creo que no queda nada de su origen religioso.
A propósito de orígenes, es curioso descubrir que es una fiesta de origen Irlandés y que fue importada de Europa sobre e l840. Con los años Halloween se ha convertido en los Estados Unidos en todo un signo de identidad cultural y en cambio no ha arraigado demasiado en Europa a pesar de que últimamente algunos interesados lo están intentando a toda costa. Pase lo que pase, espero que en mi tierra se siga celebrando la Castanyada y espero que mi abuela Carme me tenga guardados algunos panallets para cuando vaya a visitarla (que será muy pronto).
Y a la espera de que pueda disfrutar pronto de los manjares de Viladrau, me salvaron la vida unos deliciosos panallets que Marta Colomina preparó como colofón de una cena memorable en su casa de San Francisco. Gracias Marta y Marc por esta fantástica velada, espero estar mínimamente a la altura en el partido de vuelta en Palo Alto.
Creo que esta fiesta responde mucho a la manera que tienen los americanos de hacer algunas cosas: Halloween es una fiesta desproporcionada y muy enfocada al consumismo. Fuentes oficiales dicen que este año cada americano se ha gastado una media de 56 dólares en la preparación de Halloween y que la fiesta ha generado 4,7 billones de dólares en cifras de negocio. Es realmente sorprendente ver lo que se gasta la gente decorando sus casas con elementos de terror o comprando los disfraces más macabras. Hombre, mirándolo desde esta parte tétrica, Halloween sigue siendo una fiesta de culto a los muertos, pero creo que no queda nada de su origen religioso.
A propósito de orígenes, es curioso descubrir que es una fiesta de origen Irlandés y que fue importada de Europa sobre e l840. Con los años Halloween se ha convertido en los Estados Unidos en todo un signo de identidad cultural y en cambio no ha arraigado demasiado en Europa a pesar de que últimamente algunos interesados lo están intentando a toda costa. Pase lo que pase, espero que en mi tierra se siga celebrando la Castanyada y espero que mi abuela Carme me tenga guardados algunos panallets para cuando vaya a visitarla (que será muy pronto).
Y a la espera de que pueda disfrutar pronto de los manjares de Viladrau, me salvaron la vida unos deliciosos panallets que Marta Colomina preparó como colofón de una cena memorable en su casa de San Francisco. Gracias Marta y Marc por esta fantástica velada, espero estar mínimamente a la altura en el partido de vuelta en Palo Alto.